Aunque es distinto para cada individuo, hay algunos pasos que podrían facilitar el proceso. Quizá en algún momento de la vida has escuchado la palabra “autocuidado”, una práctica, o mejor dicho, un conjunto de prácticas que las personas realizan con el objetivo de mantener su salud y bienestar, que depende de cada uno como individuo y que, por mucho que varíen de persona a persona, ayudan a mejorar la calidad de vida. Es aquí donde se lanza la primera pregunta importante del día: ¿cómo puedo crear una estrategia de autocuidado? Si bien no es tan fácil decir qué funciona o qué no, sí podemos dar una pequeña guía, una serie de pasos que deberás considerar al momento de crear tu estrategia y que responderán a preguntas como: ¿cómo lo incluirás en tu vida cotidiana? ¿funcionan en aspectos individuales y colectivos de tu vida?
¿Recuerdas la frase “más vale prevenir que lamentar”? En este momento no podría ser más precisa. La prevención constituye el pilar principal de una estrategia de autocuidado y la razón es tan simple como esa frase: si tomas medidas en este momento, es mucho más fácil prevenir cualquier complicación en el futuro y si se presenta, será mucho menor el impacto en tus planes para el futuro.
El autocuidado debe estar estrechamente relacionado con el cuidado de la salud y este, a su vez, beneficia aspectos de la vida tales como la economía, dado que nos permite ahorrar al prevenir padecimientos en el futuro. Es aquí donde también se relaciona el autocuidado con el uso responsable de los medicamentos de uso libre, pues al usarlos correctamente, se disminuyen gastos y mejora la calidad de vida con productos creados para reducir el riesgo de enfermedades.
A veces no nos damos cuenta, pero el cuerpo hace muchísimo por nosotros y nosotros, ¿qué hacemos por él? Incluir en la estrategia de autocuidado las actividades físicas, recreativas, una buena alimentación y hasta el descanso, contribuyen considerablemente al bienestar físico y mental.
Recuerda que solo tú eres responsable de tu bienestar y que reconocer los hábitos y conductas que te afectan, es el primer paso para construir una estrategia de autocuidado que te beneficiará en muchos aspectos de la vida.